Tal y como si fuera una película de terror, un tiburón blanco de 14 pies ataco a una persona en una playa de Sídney, Australia dejando solamente la mitad del cuerpo.
Muchas personas miraban con horror, pero nadie pudo hacer nada para ayudar.
La víctima no ha sido identificada y las autoridades dicen que esta es la primera vez que sostienen un ataque fatal desde el 1963.